Hay algo que me produce profunda admiración: la gente que, siendo ya muy anciana, logra mantener un espíritu joven, alegre y entusiasta.
Y no solo se trata de vivir muchos años, sino de llegar con buena salud y buen ánimo.
Desde pequeña, en mi propia familia, he conocido personas maravillosas que pasaron los 90 y casi rozaron los 100.
Y aunque cada una tenía sus costumbres y hábitos, algo las unía: eran personas de espíritu alegre, inquieto, que sabían disfrutar los pequeños placeres de la vida.
Sin ir más lejos, por estos días han sido noticia los 101 años de Kirk Douglas. La leyenda de Hollywood asegura que logró llegar a centenario gracias a los buenos hábitos y a su actitud positiva.
¿Qué tienen en común las personas longevas? Aquí te cuento sus secretos:
Alimentación saludable
Una dieta equilibrada ayuda a tener una buena calidad de vida y evita que se desarrollen enfermedades.
Según un estudio sobre las personas centenarias llevado a cabo por la Universidad de Georgia, quienes llegan a los 100 años suelen consumir mayor porcentaje de carotenoides (zanahoria, espinaca, tomate, por ejemplo), tienen el hábito de desayunar, no han sufrido grandes cambios de peso ni se han sometido a dietas extremas.
El consumo de pescado (rico en Omega 3) varias veces por semana es una constante: es la base de la dieta de los japoneses, los segundos más longevos del mundo.
A esto, claro, se le suma evitar hábitos nocivos como fumar o beber alcohol en exceso. El consumo de carnes rojas, azúcar y lácteos suele ser moderado entre la gente longeva.
Lee también: Las mejores rutinas de ejercicio a partir de los 50
Mover el cuerpo
La edad adulta no debiera ser excusa para quedarse sentados. El yoga, por ejemplo, es de gran ayuda para el bienestar físico y mental.
Pero si quieres algo aún más simple, nada como caminar. Cada uno a su ritmo, lo importante es evitar el sedentarismo.
Indra Devi fue una maestra de yoga pionera en Latinoamérica que alcanzó los 102 años.
Cuando cumplió el centenario le consultaron por su sorprendente elasticidad: ella respondió que lo que le sorprendía es que hubiera “tantos jóvenes sin libertad en sus movimientos y tantos mayores con temor a su propio cuerpo.”
Mover la mente
Las personas longevas no ocupan su mente con preocupaciones sino que disfrutan de las pequeñas cosas, con una vida tranquila pero activa.
Una mente abierta a nuevos conocimientos ayuda a ejercitar la memoria y el cerebro. Viajar, leer, aprender algo nuevo…
Humor y lazos sociales
El estrés y la longevidad no se llevan bien. El buen humor es una constante entre las personas que llegan a vivir muchos años, ya que una actitud más relajada ante la vida juega a favor a la hora de cumplir años.
Del mismo modo, las personas longevas suelen estar en contacto con otras personas y viven mejor gracias al amor de su familia y amigos.
Evitar el aislamiento y conectarse con otros miembros de la comunidad ayuda en el aspecto emocional y social.
Controles médicos
Asistir al médico es fundamental para cuidar la salud y prevenir enfermedades. El chequeo es importante a cualquier edad, pero a medida que pasan los años, la salud tiende a deteriorarse.
Controlar patologías crónicas para tomar la medicación adecuada, hacer chequeos clínicos de rutina y asistir al odontólogo son parte fundamental para llevar una buena calidad de vida.
Leave a Reply