El paraíso oculto que guarda la isla mexicana Holbox ya no es un secreto.
Pero aún así, cuando comparas esta diminuta isla con lugares como Cancún, Acapulco o Cabo, este magnífico sitio al norte de Yucatán resulta una verdadera gema oculta.
Holbox es una aldea de pescadores que se mantiene fiel a sus orígenes y lleva un estilo de vida relajado.
En 2011, la isla fue declarada área protegida por el gobierno de México, como parte de la reserva ecológica más grande del país, Yum Balam.
La mayoría de los desarrollos turísticos han mantenido el estilo pintoresco y único, mezclándose con el resto del paisaje y a tono con el ambiente despreocupado de la ciudad.
Holbox es sinónimo de tranquilidad
Muchos de sus hoteles son ecológicos y varios de ellos son manejados por sus propios dueños.
Llegar hasta allí no es complicado, aunque no es tan sencillo como un tomarse un taxi del aeropuerto a la ciudad como sucede en Cancún.
La ciudad cuenta con un pequeño aeropuerto y hay servicio de taxis aéreos desde Cancún y Cozumel.
Si no, deberás conducir un par de horas desde Cancún, tomar un ferry desde la pequeña ciudad Chiquila y luego cruzar las arenosas calles de la ciudad caminando, en bicicleta o en un carrito de golf hasta llegar hasta tu hotel.
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Así es. No se permiten coches en la isla. Tampoco hay bancos, cajeros automáticos ni correo.
Las atracciones de Holbox
La mayor atracción de la isla es el tiburón ballena. Desde junio hasta septiembre se pueden ver migrar a gran cantidad de tiburones ballena en esta área.
Los guías turísticos autorizados pueden acompañarte a conocer estas increíbles criaturas marinas que se alimentan de plancton y krill, y que llegan a medir hasta 12 metros de largo (40 pies) y pesar alrededor de 20 toneladas.
Holbox es realmente un sitio muy pequeño. La isla tiene unas 26 millas (42 kilómetros) de largo y buena parte de la costa norte ofrece playas de arena blanca.
La mayoría de las actividades gira en torno a la ciudad y la playa, por lo que puedes llegar a todos lados a pie.
En el área del lago, el manglar alberga variedad de aves y plantas, muchas de las cuales son únicas en la zona y están en peligro de extinción.
Cuando es su temporada, las tortugas carey hacen sus nidos en las playas de Holbox y también cientos de aves migratorias bajan a la isla.
Si bien las mayores atracciones turísticas de Holbox son los tiburones ballena, las playas, la flora y la fauna, no hay que dejar de lado la ciudad propiamente dicha.
El encanto de una pequeña aldea
Holbox aún es una pequeña aldea de pescadores. Buena parte de sus 2000 habitantes se dedican a la pesca o a alguna actividad relacionada con ella.
Da un paseo por sus calles llenas de arena y encontrarás puertas abiertas, niños jugando al fútbol y personas en hamacas tomando una siesta.
Algunos de los hoteles de la isla son Casa Las Tortugas, Villas Delfines, Las Nubes Holbox Hotel y Casa Sandra, entre otros.
Las tarifas varían según la temporada y pueden ir desde 100 hasta 300 dólares por noche.
Hay muchos buenos restaurantes en la ciudad. Y si tienes pescado porque le has comprado a un pescador o porque has salido a pescar, puedes llevarlo al restaurante y ellos lo prepararán a tu gusto.
La cocina de la zona, como la cocina maya en general, está ganando prestigio entre los extranjeros.
Holbox celebra un festival culinario cada octubre y también realizan festejos por Carnaval durante febrero.
Si estás buscando un lugar tranquilo y especial para disfrutar, para alejarte del caos de vivir en la ciudad, de todos los aparatos electrónicos que no nos dan tregua, considera escaparte unos días a Holbox.
Es uno de esos sitios que te desacelera, te relaja y se queda contigo para siempre.
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