El tabaquismo en la menopausia, ¿cómo afecta?

El tabaquismo a cualquier edad es perjudicial para la salud, eso ya lo sabemos. Pero estos efectos negativos se acentúan a medida que pasan los años.

Si ya rebasaste los 40 años y te acercas a la menopausia, o si ya estás en esta etapa, hay una serie de efectos del cigarrillo especialmente perjudiciales para tu salud. 

Fumar en la menopausia, ¿cómo afecta?

Menopausia precoz

Se considera menopausia precoz a la que ocurre antes de los 40 años.

Un estudio realizado en Oslo y publicado en 2007 por BMC Public Health afirma que hay una estrecha relación entre el consumo de tabaco y la menopausia precoz.

En las mujeres fumadoras, aumenta en un 59% el riesgo de que esto suceda. Si se ha dejado de fumar, las probabilidades disminuyen de forma considerable.

La nicotina, una de las sustancias presentes en los cigarrillos, tiene efecto antiestrogénico, lo que significa que bloquea el accionar de los estrógenos, las hormonas que disminuyen durante la menopausia.

Se estima que fumar en la edad adulta puede adelantar su llegada unos dos años.

Osteoporosis

Una de las enfermedades que suele aparecer en la menopausia es la osteoporosis, ya que la retirada de los estrógenos debilita los huesos y estos se van haciendo más porosos.

Y el problema de esta patología es que es silenciosa: solo se detecta realizando estudios específicos.

¿Y qué tiene que ver el hábito de fumar en todo esto? Mucho. Según American Academy of Orthopedic Surgeons, la nicotina hace que la generación de hueso sea menor.

Además, fumar disminuye la absorción de calcio, fundamental para tener huesos fuertes, lo que aumenta las posibilidades de las fumadoras de sufrir una fractura.

Lee también: Cuidar tu salud a partir de los 50 años

Fumar en la menopausia, ¿cómo afecta?

Salud cardíaca

Durante la menopausia, la pérdida de estrógenos también afecta la salud cardiovascular, ya que esta hormona tiene relación con los niveles de colesterol, según informa Texas Heart Institute.

Entre los factores de riesgo modificables está fumar, y es uno de los hábitos más dañinos para el corazón.

El cigarrillo acelera los latidos, puede generar cambios en el ritmo cardíaco e hipertensión, lo que aumenta las probabilidades de sufrir un accidente cardiovascular y otras complicaciones.

Envejecimiento prematuro

Sin lugar a dudas, los temas anteriores son los más importantes, porque afectan de forma directa la salud de la mujer en sus 50. Pero también está la estética.

Una de las cosas que sucede en la piel durante la menopausia y en los años posteriores es la pérdida de elasticidad y grosor de la misma, que se refleja en un cutis más opaco, piel más seca y aparición de arrugas y marcas de expresión. Una de las causas es la disminución del colágeno.

Según la Sociedad Española de Medicina Estética, el tabaco modifica la cantidad y calidad de colágeno, además de reducir los niveles de Vitamina A y de oxígeno en los tejidos.

Y eso no es todo: el rostro delata el hábito. Arrugas marcadas, aspecto demacrado y piel de un tono más grisáceo son algunos de los signos que muestra alrededor del 16% de los fumadores.

Para terminar de comprobarlo, puedes ver este peculiar estudio comparativo.

El tabaquismo a cualquier edad es perjudicial para la salud, eso ya lo sabemos. Pero estos efectos negativos se acentúan a medida que pasan los años. Si ya rebasaste los 40 años y te acercas a la menopausia, o si ya estás en esta etapa, hay una serie de efectos del cigarrillo especialmente perjudiciales para tu salud.  #salud #menopausia
Alejandra Sarasqueta

Alejandra Sarasqueta es escritora residente en Argentina. Estudió cine, escritura y redacción. Ha colaborado con Suite101 y ahora es Guía de Belleza y de Espectáculos para la Guioteca del diario El Mercurio en Chile. Escribe sobre películas en su blog "La entrada al cine" y también sobre teatro y mujeres fabulosas de más de 50 años.

Be first to comment

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.