Seguro que conoces a parejas que a pesar de llevar muchos años juntos se ven felices, con una complicidad especial y digna de envidia.
¿Cómo lo hacen? ¿Tienen una receta secreta para preservar la armonía en su relación?
No hay que ser un lince para diferenciar una pareja feliz de una que no lo es.
Los gestos de ternura, las miradas cariñosas y cómplices, el deseo constante de que el otro esté bien, no pasa desapercibido.
Son personas que han logrado conciliar su visión de la vida, su trabajo y sus proyectos.
Han verbalizado sus necesidades y han cultivado con éxito su pequeña parcela de intimidad, respetando el espacio del otro para favorecer y aumentar el deseo de seguir juntos.
Las parejas que se sienten felices juntas no vierten su frustración en el otro, ni buscan que se comporte como alguien que no es. Aprenden a convivir sin esperar la perfección. Aceptan y son aceptados.
Tres errores fundamentales y qué hacer para evitarlos
Dejar de esforzarse
A principio de una relación la pasión hace que todo parezca diferente. Cada día hay algo nuevo que descubrir y la vida parece una sucesión de momentos efervescentes y maravillosos.
Con el tiempo se tiende a dejar de esforzarse por mantener viva la relación y se puede caer en la monotonía.
Es algo natural, el problema estriba en que esta normalidad o monotonía puede conllevar el declive de la pareja.
Entonces la felicidad de los primeros momentos puede desaparecer y dar paso a la frustración y los reproches.
Falta de seducción
Este es el peor y más común de los errores. Ya estamos enamorados, vivimos juntos, estamos bien y no necesitamos seducirnos el uno al otro.
Pero si dejamos de hacerlo, la relación va camino de una rutina que poco a poco se convertirá en una losa.
La seducción debe ser mutua, va más allá del sexo y reside en pequeñas cosas diarias que fomentan y avivan la llama de la pasión.
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Sacrificarse en lugar de comprometerse
Una relación de pareja sana y feliz se basa en el compromiso, nunca en el sacrificio.
Naturalmente que en ocasiones hay que hacer concesiones mutuas, pero esto no debe convertirse en un hábito y menos aún en una obligación.
Pedir que la otra persona haga algo que no desea es un acto egoísta y da paso al resentimiento.
Lo constructivo es respetar y comprender los deseos de tu pareja y buscar una solución que os satisfaga a los dos.
Tips para una vida en pareja feliz
Los consejos para evitar estos errores te parecerán muy simples, pero son realmente eficaces
- Cultiva el romanticismo.
- Escucha a tu pareja y busca momentos de complicidad.
- Organiza unas horas únicamente para vosotros dos.
- Cuídate tú primero.
- Sorpréndele a diario.
- Hazle reír con frecuencia.
El amor también es cuestión de miradas, de saber valorar al otro y reconocer lo que te aporta.
Dile que le amas en cualquier momento del día. Déjale notas cariñosas bajo un imán de la nevera o envíale emoticonos amorosos por Whatsapp.
El camino de la vida en pareja puede ser muy gratificante cuando el amor se cultiva.
Las parejas que hacen tándem conservando su autonomía, su vida profesional y su libertad de pensamiento, son parejas que respiran energía, que se aman mejor; que superan los problemas aunando fuerzas y a los que la convivencia les sigue aportando felicidad a través de los años.
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