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Puede ser una hora por día, el fin de semana o unas vacaciones: cada uno goza de distintas dosis de tiempo libre a lo largo del año.
Y no hay que subestimarlo.
Dedicarnos tiempo a nosotros mismos es tanto o más importante que las rutinas que a veces nos atrapan en el día a día.
Pero por bello que suene esto de tener horas a nuestra disposición, podemos caer en actos que no colaboren con nuestro relax o peor, que nos dejen más estresados.
Respira, acomódate y lee estos consejos para usar el tiempo libre a tu favor.
1.- Escapar del estrés:
Imagínate que sales a caminar por el parque, respiras el aire puro, escuchas el silencio… y suena el celular avisando que recibiste un nuevo email, chat o notificación.
Te sientes tentado y ves de qué se trata.
Y resulta que es tu jefe. ¡Horror!
Uno no puede obligarse a dejar de pensar en algo que le agobia, pero sí podemos hacer que el tiempo libre sea nuestro.
Puedes chequear tus mensajes si estás de vacaciones, pero intenta no estar pendiente a cada minuto de algo que sabes que podría generarte estrés.
2.- Tener flexibilidad:
Hacer de las vacaciones o de un día de relax una rutina de estrictos horarios no es la mejor idea para disfrutar.
Hay quienes suelen necesitar vacaciones de las vacaciones, y no queremos que eso pase.
Permítete dormir un rato más en la mañana, deja espacio para la improvisación.
Está bien hacer planes, pero no te sobrecargues.
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3.- Hacer cosas que te gusten:
No importa si son un par de horas el fin de semana o varios días, durante el tiempo libre lo mejor es hacer lo que te venga en gana.
Hay cosas que asociamos más con el esparcimiento, como ir al cine, dar un paseo, visitar un parque de diversiones o salir de compras.
Pero no hay una ley.
Si quieres dedicarte a ordenar tu casa, hazlo. Si deseas dormir, pues duerme.
A veces lo mejor que puede pasar es disfrutar un descanso reparador.
Elige qué hacer o qué no hacer, lo importante es que sea algo que te de placer.
4.- Probar nuevas experiencias:
El tiempo libre bien puede ser ocupado por actividades gratificantes que siempre hayamos querido probar o que queramos retomar.
Bailar, tocar un instrumento, pintar, hacer ejercicio, nadar.
Salir del entorno conocido y estar en contacto con otros, aprendiendo algo nuevo, hace bien al espíritu y es una buena forma de aprovechar el tiempo libre en algo que nos genere disfrute.
También puedes viajar o visitar algún sitio cercano al que nunca hayas ido.
O probar algo bien diferente, como tirarte en paracaídas o bucear. Tú decides.
5.- Evitar sentir culpa:
El tiempo libre es bueno, es sano para el cuerpo y la mente.
Es necesario.
Pero a veces podemos sentir cierta culpa por estar relajados en vez de corriendo detrás del trabajo o la familia.
Merecemos descansar y entender que parar la máquina unas horas o unos días nos hará funcionar mejor después.
Olvídate de lo que crees que deberías estar haciendo y disfruta.
Relajarse y pasar un buen momento ¡también debería ser considerado una obligación!
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